Pedro Acosta se sorprendió cuando descubrió que “nunca te ganas el respeto en este tanque de tiburones; sólo hay que mirar a Rossi, Lorenzo y Biaggi”.
Este año, Pedro Acosta debuta en MotoGP. Sus competidores siempre le han tenido en alta estima. A pesar de un reciente declive en los resultados, ya ha conseguido dos podios y ha demostrado que tiene lo que hace falta para estar en lo más alto. Rápidamente se estableció en la competición por los primeros puestos.
El joven piloto del Red Bull GasGas Tech3 reconoció al diario La Vanguardia que su presencia puede no haber sido muy bien recibida por sus rivales, pero subrayó que las amistades y las buenas relaciones no son el objetivo de MotoGP:
No creo que haya sentado muy bien a los ciclistas. Vengo aquí para divertirme y ganar, no para ir a cenar con mis compañeros de trabajo, así que tengo una mentalidad un poco diferente. No me gusta hacer amigos aquí. Sólo hay dos personas con las que tengo una relación: Jorge Martín y Aleix Espargaró. Hacer amigos es difícil cuando estás compitiendo”.
Según Acosta, los demás pilotos de MotoGP le trataron igual que le habrían tratado a él: “Me recibieron igual que yo a ellos”. Hay que darse cuenta de que éste es un entorno competitivo y que no es lo más sencillo del mundo arriesgar la vida por un mismo objetivo. Sin embargo, poco a poco me voy haciendo un hueco entre la multitud de MotoGP”.
El español asegura que no le preocupa si se gana el respeto o no: “No me he centrado en eso”. En un tanque de tiburones como éste, nunca te ganas el respeto. Pasó con famosos que nunca aprendieron a apreciarse, como Max Biaggi y Valentino Rossi o Jorge Lorenzo y Valentino Rossi.