La Desmosedici de este año representa un salto de calidad significativamente superior al que se produjo entre la GP22 y la GP23, aquella con la que sólo Marc Márquez es capaz de aterrizar de forma consistente en el podio. Esto se refleja en los números que han dejado hasta ahora las Ducati GP24 y GP23.
La discusión en torno al grado de ventaja que tienen los pilotos de MotoGP que comenzaron la temporada 2024 con la especificación más reciente de Ducati sigue vigente, aunque en menor medida que hace unos meses, cuando la marca de Borgo Panigale tuvo que elegir al compañero de fábrica de Francesco Bagnaia para 2025.
Jorge Martín y Márquez se perfilaban como los principales candidatos a sustituir a Enea Bastianini tras el pésimo inicio de año de este último. Al final, Márquez se impuso. Ducati asegura que el rendimiento que el catalán, que entonces aún no había ganado una carrera en Mugello, pudo exhibir con una moto de 2023 -que, teóricamente, rendía peor que el prototipo de este año- fue uno de los principales factores de su decisión.
Poco después de recibir la confirmación de que será piloto oficial la próxima temporada, Márquez comentó: “Los ingenieros de Ducati vieron mi progresión con la moto 2023; eso pesó más que el resto.” Gigi [Dall’Igna, director general de Ducati] declaró que mi mejora y mi progreso en la pista fueron lo que realmente inclinó la balanza”.
Aunque el propio Dall’Igna reconoce que la GP24 es indiscutiblemente una moto superior a su predecesora, algunos se atreven a rebatir o relativizar esta afirmación.
Dall’Igna declaró en agosto durante el Gran Premio de Gran Bretaña que “definitivamente hemos mejorado la GP24 en aquellas áreas en las que la GP23 era un poco más débil.” En aquel momento, Ducati acababa de introducir la última serie de actualizaciones antes de detener el desarrollo para que Bagnaia y Martin pudieran competir por el título con motos que ya conocían. “Tengo que decir que los chicos de fábrica han hecho un trabajo realmente bueno”, dijo Dall’Igna.
Además de confirmar las declaraciones de Dall’Igna, un examen minucioso de las pistas que han dejado hasta ahora los dos modelos y una comparación con los resultados del campeonato del año anterior acaban efectivamente con la discusión. Márquez ha sido el único piloto que ha sobrevivido a la presión de los de la GP24, sobre todo en la última parte de la temporada, gracias en gran parte a los cuatro pilotos que corren con GP23.
La mejora de calidad de la moto de 2024 respecto a la de 2023 es significativamente mayor que la del prototipo de 2022, según una comparación de las estadísticas dejadas por la GP22 en 2023 y la GP23 en 2024.
Los cuatro pilotos que participaron en el campeonato con la “vieja” Ducati (GP22) el año pasado lograron un total combinado de quince salidas en primera línea, trece podios, tres pole positions (dos Marini y una Di Giannantonio), y cuatro victorias (tres Bezzecchi y una Di Giannantonio).
El 23,6% del total de 17 victorias del fabricante de Bolonia procede de estos cuatro triunfos. Cuando Ducati logra 13 de sus 43 podios totales, ese porcentaje aumenta hasta el 30,2%. También es importante recordar que en domingo, los cuatro pilotos pudieron subir al podio, y todos empezaron desde la primera fila al menos una vez.
Sin embargo, en 2024, esos porcentajes disminuyen para los individuos que siguen pilotando la versión desfasada (GP23). Sólo Márquez mantiene cerca esa Desmosedici entre ellos. Sólo en dos carreras este año (Misano y Aragón), ambas ganadas por el piloto #93, se ha impuesto la especificación, que representa el 13,3% de las 15 victorias totales de Ducati.
De los 48 podios que el fabricante italiano ha conseguido hasta ahora, sólo 10 (20,8%) son GP23, ocho de ellos con Márquez.